Reencuentro con la familia

La cabaña Black Thunder... nuestro padre Zeus la había construido para todos los hijos que había tenido porque si... todos, no éramos precisamente pocos, aunque por ahora solo conocía a 4 de ellos.
Con una maleta colgada al hombro, abrí con la llave de la cabaña que guardaba desde hace años la puerta de madera. Al parecer, era el primero en llegar, sonreí triunfal dejando mi maleta en la mejor cama, o al menos la mejor a mi parecer, miré la hora y me pregunté donde estarían en ese mismo instante mis hermanos e... Isabella, por qué demonios tendría que ser mi hermana por parte de padre? la chica estaba que... pf

Me abrí un par de botones de la camisa pues aunque estuviésemos en primavera la verdad esque el calor ya arreciaba bastante. Me acosté en la cama no sin antes cerrar la puerta y soltar un suspiro, me quedé mirando al techo mientras notaba como el sueño iba invadiendo mi cuerpo... ya era hora, hacía días que no podía dormir... siempre me pasaba por estas fechas.

Seguía acostado cuando oí el ruido de la puerta, fruncí el ceño creyendo que la había cerrado, aunque seguramente la habría abierto el aire.
Cerré los ojos al asimilar que no habría nadie hasta que noté el movimiento de una melena cerca mio... no me tocó, pero era una de esas extrañas sensaciones que tienes de que no estás solo, y esta vez había acertado. Al abrir los ojos me sobresalté un poco al ver a Isabella, ella se apartó y yo me incorporé de un salto con una gran sonrisa -No que va... solo estaba descansando un poco la vista.- Le respondí bromeante, la verdad desde que la había conocido, me llevaba demasiado bien con Bella, por lo que no pude evitar atraparla en un abrazp y empezarle a dar vueltas en el aire -Que tal las vacaciones Bells?.- Pregunté posándola en el suelo

Mientras estábamos dando vueltas, gritó que la bajase y, en un principio y antes de que se riera, pensé que iba enserio, pero después soltó aquella risa de niña pequeña y me uní a su risa haciendo que toda la cabaña sonara en un tono de jovialidad y celebración.
Luego me respondió con otra pregunta y asentí rasc´ñandome la nuca...
-Si es cierto Bells, lo siento, pero las próximas vacaciones nos iremos juntos... a ver el mundo mortal.- Le propuse divertido, la verdad era que no me gustaba que Bells se pasase los 365 días del año.
-Las mias han ido... bueno, normales, sin sobresaltos ni poderes, mi madre sigue bien y este año casi nos hemos pasado más tiempo en la playa que en nuestra propia casa.- Le informé mientras leía sus pensamientos y me ponía a buscar yo también su libro.

-Bueno Bells... pero no puedes decir que es más divertido quedarse aquí... por mucha gente que se quede, siempre ves los mismos paisajes... deberías venirte conmigo las próximas vacaciones, enserio.- Le sonreí animadamente, unas imágenes borrosas pasaron por la cabeza de Bella, pero me dió muy poco tiempo pues enseguida lo sacó de su cabeza, puse cara de pervertido y alcé las cejas al unisono -Quien es Bells? no creo que mi hermana me oculte una visión por nada... has pasado las vacaciones con alguien puede ser?,.- Pregunté incisivo, mientras buscaba debajo de las camas... donde habría dejado esta descabezada el libro?
-Si bueno... la playa está bien, aunque me quemé un par de veces... nada grave, es este?.- Dije levantándome de debajo de una de las camas y enseñando un libro de tapas negras, no sabía ni el título, pero era el único que había... o eso creía.

-Vale vale hermanita... lo siento.- Alcé ambas manos haciéndome el inocente y haciendo un puchero de niño pequeño, no es que me importase mucho sobre si me regañaba de verdad o no, aunque sabía que esta vez era solo un "mordisco" cariñoso.

Ella miró el libro y no me hizo falta leer su mente para averiguar de que no se trataba de ese, luego, dirigió la mirada hacia donde había estado antes para sonreir corriendo al ver un libro en un rincón. Alcé ambas cejas con una sonrisa divertida -Maldita sea... como quieres que encuentre ese libro si era del mismo color que el del piso! se camuflaba.- Me crucé de brazos ofendido, claramente no iba enserio.
Escuché lo que dijo sobre el libro que sostenía en mis manos y lo miré con atención acariciando su tapa frontal -Te lo ha dado... "tu" padre o... "nuestro" padre?.- Al decir "mi padre me lo dió" no sabía si se refería a Zeus, o a su padre adoptivo... si es que tenía, no sabía mucho sobre su vida pasada, aunque esto no era raro en el cmapamento, nadie quería hablar sobre cosas así.

Inspeccioné un poco más el libro, clavando mis celestes ojos en él con el ceño fruncido, y si le daba una pequeña descarga? no... eso ni soñarlo, podría incendiar el cuaderno y mandarlo todo al garete.
-Alomejor uno de nuestros hermanos tiene el método o la llave que lo abriese... algo así como una herencia compartida.- Me encogí de hombros desistiendo sobre la curiosidad que me traía el cuaderno y lo arrogé a su cama, escuchándola con un poco de envidia -Pues.. a decir verdad lo único que tengo de él son sus genes... nunca... enfín, nunca contactó conmigo, tampoco me mandó nada, pensé que no era el único al que le pasaba... pero veo que sí.- comenté un pcoo resentido con una sonrisa amarga dibujada en mi rostro.
Me senté en la cama y me volví a reostar mirando el techo.